Este espacio esta inspirado en mi hijo y creado para compartir con ustedes está nueva y maravillosa experiencia de ser mamá! Desde el embarazo hasta el día de hoy, cada día hay algo nuevo que aprender y enseñar a nuestros bebes.

Todo lo que hago, lo hago con amor y guiada por mi instinto de mujer y ahora de MAMA

miércoles, 23 de diciembre de 2015

SER MAMÁ: Una historia jamás contada

A las que han leído mi blog, saben que soy una eterna enamorada de mi hijo y de la maternidad. Que respiro pasión por mi labor como mamá y que mi admiración hacia todas las mamás (en especial a la mía) crece al mismo ritmo que mi hijo, a pasos agigantados. Pero en este caso, voy a dejar de un lado todos esos momentos mágicos y llenos de amor, para hablar de una realidad de la que muy pocas mujeres hablamos, tal vez por vergüenza, por competitividad, por ese miedo a ser imperfectas o por ser consideradas malas madres, pero en mi corto camino como mamá, he visto que es algo por lo que todas pasamos.

Antes de tener a mi hijo, ya adulta, en conversaciones con mi mamá sobre la maternidad, la cuestionaba mucho cuando ella me decía: Los hijos son lo mejor y mas lindo que le puede pasar a uno en la vida pero no es una labor sencilla, requiere de sacrificio, paciencia y habrá días que quieres salir corriendo. Y es que, como algo tan lindo, tan dulce, que genera tanto amor, podría generar este tipo de reacción? Según lo que yo veía en los comerciales, todas las marcas coincidían en lo mismo: momentos mágicos y especiales. También preguntaba a mis pocas amigas con bebes y su primera respuesta era: es lo mejor! Entonces mi mamá como iba tener esa percepción? 

Bueno pues como dicen por ahí, el tiempo me dio la respuesta a este interrogante: Cuando me convertí en MAMÁ. Y es que cuando estas esperando tu primer bebe, estas llena de expectativas y ves el futuro color rosa (bueno o azul jajaja), el caso es que del color que lo veas solo tienes en tu cabeza esos momentos que las marcas de pañales y productos de aseo nos vendieron, pero en realidad absolutamente nadie te dijo o te podía dimensionar lo que venia en camino. 

Algunas veces, durante el embarazo, las personas bromean con frases como aprovecha para dormir, aprovecha para hacer las cosas que te gustan porque cuando nazca el bebe... Cuando nazca el bebe, que? Nadie termina nunca esa frase y uno tampoco es que este muy interesado en buscar la respuesta. Sentimos que podemos con todo y que en nuestro caso será diferente porque nos derretimos de amor. Tal vez, una que otra mamá trata de hacernos aterrizar un poco pero consideramos fuera de tono sus comentarios, así que tratamos de omitirlos... Sin saber cuan sabias son sus palabras. 

Nace el bebe y así como nos prometen las marcas, es un momento maravilloso y perfecto... Por unos minutos. Porque en seguida comienzas a entender esas palabras que mencionaba de mi mamá al inicio. Adolorida por el parto o la cesárea, comienzan hablarte de términos con los que apenas estas familiarizando y enfrentarte a miles de situaciones a la vez: curaciones de la herida, la "bajada" de la leche, panza de seis meses de embarazo (pero sin bebe adentro), curación del ombligo del bebe, cambio del primer pañal, reflejo de succión, registro del bebe, vacunas, tamizaje postnatal, etc y a esto le sumamos algunos o muchos interrogantes: cuando me bajara la leche? Como se que "las tengo llenas"? Tengo mucha o poquita leche? Como se cuanto come el bebe? Por que no se quiere "pegar" el bebe? Me va doler? Cada cuanto hay que darle de comer? Cada cuanto hay que cambiarle el pañal?  Como se si hizo popo? Como lo baño? Cuanto tiempo debo esperar a que le salgan los gases? Y si le da colico, como sé? Y si duerme mas y no come? Y si come y no duerme? Si lo tengo mucho en brazos se mal acostumbra? Cuanta ropa debo ponerle para que no sienta frío o no se enferme? Como se si tiene calor? Como le quito el hipo? Le da mucho hipo, es malo? Es que puja todo el tiempo, tiene estreñimiento? y podemos seguir sumando porque día a día nos surgen miles de interrogantes, la buena noticia es que ya sea por instinto, por el papá, por la mamá, el pediatra o google, se resuelven sin mayor inconveniente.  Después vienen las noches sin sueño, nuestros bebes con horarios invertidos (unos mas que otros), te despiertas en la mañana y cuando menos te das cuenta ya es de noche y ni te has bañado, satisfecha porque tienes mucha leche o frustrada porque por poca leche o algún motivo adicional no pudiste lactar a tu bebe y toco tetero. 
El bebe duerme mucho, el bebe no deja de llorar, el bebe solo se duerme en brazos, las visitas inesperadas, las visitas eternas, la gordura, el cansancio, las ganas de poder retomar el ritmo de tu vida, mi bebe se enfermo, la faja, los consejos, la cuarentena, los mitos y leyendas y así van pasando los días, semanas y meses. Cuando menos te das cuenta ya te entiendes perfecto con tu bebe, sabes lo que necesita y cuando lo necesita. El bebe ya pasa derecho, sabes que cada ruido o llanto es diferente y tienes el control de la situación. Ahora pareces un pulpo, haces mil cosas a la vez, corres por toda la casa, te arreglas en diez minutos, bañas al bebe, le das de comer, arreglas la casa, cocina, haces desayuno, arreglas pañalera, bajas, subes, recoges desorden,  todo para poder salir a tiempo, aunque algunas veces no lo logres por cambio de pañal a ultima hora. Trabajas o te dedicas a la rutina del bebe durante el día y en la noche rutina de sueño. Pasan los meses y cuando crees tener ya todo medio controlado, el bebe se comienza de nuevo a despertar en la noche porque se esta dando cuenta que es un ser independiente (uno diferente a mamá), porque esta próximo a gatear o caminar, porque esta enfermo o simplemente porque quiere que lo consientas. Entonces siguen tus días como pulpo pero ahora con cansancio y sueño incluido, lo que te genera mal genio, frustración. Sientes que todo te toca a ti, que nadie te ayuda, que no te puedes enfermar porque no hay incapacidad medica para las mamás. Arranca tu bebe con las "pataletas" y tu paciencia y tolerancia deben triplicarse, vienen los cuestionamientos de estar haciendo bien tu labor como mamá y es en uno de esos precisos momentos cuando quieres salir corriendo, ceder tu contrato de maternidad, cuando te quieres esconder debajo de la cama, cuando sueñas con regresar el tiempo y que tu única responsabilidad sea tender la cama, cuando piensas en esas palabras sabias que nos dicen que los hijos son lo mas hermoso que nos puede pasar pero también es una labor compleja y que demanda mucha responsabilidad. 

Todo este RESUMEN EJECUTIVO es para decirles que no son las únicas que pasan por esto, nos pasa a todas las mamás. Es duro, muchas cosas pasan al mismo tiempo y sin tiempo. Ya no puedes dedicarte el mismo tiempo y hacer las cosas que te gustan sin que haya una interrupción. Entonces no está mal sentirse cansado, agotado, sin fuerzas, sin ganas... porque si, somos mamás y podemos con todo, pero somos humanas y hay días en los que no podamos con todo, en los que algo nos queda grande, en los que no todo sale perfecto o como queramos, en los que quisiéramos ahorcar a nuestros hijos, vuelvo y digo: no esta mal sentirse así. 

Desafortunadamente no nos dicen que estas cosas pueden pasar, solo dicen que no es fácil.  Nos pasa a todas y es que con nuestro coctel de hormonas, hay días que tenemos paciencia y otros que no tanto. Pero entre tantas cosas que nos bajonean, debemos ver todas las bendiciones que hay. Concentrarnos en lo bueno y maravilloso de la vida, para que esas ganas de salir corriendo no sean tan constantes. No se sientan mal por sentirte así, nuevamente: nos pasa a todas. Sentirse frustrado y agotado no esta mal, lo que si hay que hacer es buscar la salida al lado de nuestro esposo, familia o grupo de apoyo. Es cierto, la vida cambia cuando llegan los hijos pero solo de uno depende si la sigue pintando de rosa... o azul. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario